Casi dos años después del inicio de la pandemia, todavía no se ha despejado la incógnita sobre un modelo final de trabajo que encaje a empresas y empleados. Las enormes expectativas generadas respecto a una disrupción radical en los modelos de trabajo parecen ir difuminándose y muchos expertos consideran que el trabajo híbrido se consolidará definitivamente en 2022.
Como la ley considera que a partir de dos días de trabajo en remoto hay que hacer una modificación contractual, muchas empresas están limitando a esta cifra el teletrabajo de forma que puedan evitar todos los trámites derivados.
Por otro lado, informes como el Work Trend Index publicado por Microsoft, indican que el 41% de los trabajadores estaba considerando abandonar su puesto de trabajo en el próximo año. De hecho, en Estados Unidos, las salidas voluntarias se han contabilizado en 4,3 millones de personas en agosto y 4,4 millones en septiembre (2021).
Estamos cambiando la forma de entender el trabajo en nuestras vidas y hemos colocado en el foco aspectos como el bienestar, la salud o el equilibrio entre vida personal y profesional. Así, según el informe Future Consumer Index de EY, el 31% de los encuestados espera mejorar en este sentido en 2022.
- En la parte digital, se ha avanzando mucho para dar con las mejores herramientas que nos permitan trabajar en remoto pero hemos descuidado el bienestar de los empleados al no tener control sobre la situación de cada uno en su domicilio.
- En la parte física, se están transformando muchos centros de trabajo, eliminando puestos fijos, tirando tabiques para levantar zonas de cocreación y espacios colaborativos.