Actualmente, no hay ninguna duda de que una de las principales diferencias entre compañías reside en la motivación y el compromiso de los empleados. De hecho, la captación y retención de talento se trata de una de las prioridades estratégicas de las áreas de gestión de personas.
Sin embargo, esto que parece relativamente sencillo y dependiente del salario es, en realidad, el resultado de implementar con éxito una estrategia en la que intervienen diferentes herramientas. Por eso, en este post os vamos a dar algunas de las más comunes:
- Un salario económico acorde al trabajo realizado. Aunque el salario emocional está cobrando un papel cada vez más importante, no debemos olvidar que si el salario económico no está a la altura, existirá un riesgo de perder a nuestros empleados.
- Programas de formación
- Programas de beneficios. Existen diferentes opciones exentas de IRPF como el comedor, la guardería o el transporte.
- La promoción del bienestar físico y emocional en el trabajo
- La cultura de empresa y el buen ambiente laboral.
- La conciliación laboral y teletrabajo.
- Un buen plan de onboarding y el employee journey
- Un employer branding atractivo. El employer branding es la imagen de una empresa como empleadora. Esta imagen es, de hecho, la suma de la reputación de la empresa entre sus empleados vigentes y entre los candidatos potenciales.
- El teambuilding y los eventos corporativos.
- Líderes que inspiren y con los que los empleados quieran desarrollar una carrera profesional.